Discapacidad visual en niños: tipos, causas, prevención

Una buena visión es esencial para que un niño disfrute de lo que ve, reconozca el mundo y aprenda en la escuela. Sin embargo, los niños tienen deficiencias visuales congénitas y adquiridas. Presentan ciertos síntomas. Cómo identificar que un niño tiene una deficiencia visual:

• El niño se queja de visión borrosa.
• Un ojo mira al frente, el otro se mueve de forma errática.
• El niño a menudo entrecierra los ojos, parpadea. Puede taparse un ojo con la mano.
• Fatiga ocular, dolor de cabeza.
• Visión doble, mareos.
• El niño puede leer durante poco tiempo.
• Hay trastornos en la coordinación de movimientos, el niño puede tartamudear al caminar.
• Le duelen los ojos, tiene sensación de quemazón.

Si se observan dos o más síntomas, es necesario consultar a un médico. Él prescribirá un examen, diagnosticará y prescribirá un tratamiento.

Tipos de discapacidad visual en niños

Lo más frecuente es que en los niños se desarrollen este tipo de patologías:

• Estrabismo o estrabismo. Los ojos del niño miran en diferentes direcciones y no se centran en un objeto. A menudo se produce debido a una violación del tono de los músculos oculomotores.
• Miopía o miopía. El niño ve bien de cerca, pero le cuesta ver objetos pequeños en la distancia. Esto puede deberse a cambios hormonales en el proceso de crecimiento, debido al mismo tipo de tensión en la visión, si el niño utiliza un smartphone durante mucho tiempo.
• Hipermetropía o hipermetropía. Lo que está en la distancia el niño lo ve bien, pero los detalles de los objetos cercanos los ve mal.
• Ambliopía: visión borrosa. Esta patología se corrige con gafas. Se produce como concomitante de la miopía o la hipermetropía. La ambliopía puede ser consecuencia de un traumatismo o de una patología congénita.
• Daltonismo: el niño no distingue algunos colores o los ve en otras tonalidades.
• El astigmatismo se produce debido a la forma irregular de la córnea. El niño ve una imagen borrosa.

Prevención de las deficiencias visuales en los niños

Por primera vez, un oftalmólogo comprueba la visión de un recién nacido. Ya entonces es posible detectar cataratas, glaucoma, estrabismo. El médico evalúa el estado de los vasos del fondo del ojo. Después, a medida que el niño crece, el diagnóstico de la visión se realiza en determinados periodos:

• A los 2-3 años se determina la agudeza visual, si hay estrabismo, si se está desarrollando ambliopía.
• A los 11-12 años comprueban las funciones binoculares, la calidad de la visión de los colores, la presencia de enfermedades.
• A los 14-15 años examinan si se están desarrollando enfermedades oculares.

Es necesario realizar exámenes periódicos para detectar las alteraciones visuales lo antes posible. Cuanto antes se inicie el tratamiento, más probabilidades habrá de recuperar la visión en la infancia.

Algunas recomendaciones para prevenir las alteraciones visuales en los niños:

• No leer tumbado. En esta posición, los vasos cervicales se oprimen, la sangre se estanca en la zona de la cabeza. Si se lee en esta posición durante mucho tiempo, puede haber una presión excesiva en los vasos de los ojos.
• La distancia del libro a los ojos debe ser de 40-45 cm.
• El lugar de estudio o de descanso, donde el niño lee, debe estar suficientemente iluminado. Así no se forzará excesivamente la vista.
• Durante el estudio, el niño necesita hacer pausas para que los órganos de la visión descansen. Es importante que el niño después de usar aparatos o leer, mire a lo lejos, considere los objetos que están a diferentes distancias.

Durante el período de desarrollo del niño, necesita una nutrición completa. Para que el cuerpo tenga recursos para el desarrollo de la visión, es importante que reciba vitamina A, grasas útiles para su asimilación. El médico puede aconsejar sobre qué otras sustancias son necesarias para una buena visión.