Fregaderos de cocina: Tipos de materiales, pros y contras, cómo elegir
- 20.11.2022
Antes, la oferta de fregaderos para la cocina era escasa: la mayoría eran de hierro fundido esmaltado. Y ahora hay muchas opciones disponibles: desde el acero inoxidable hasta la piedra e incluso la madera. Cada material tiene sus propias peculiaridades, pros y contras. ¿Qué material es mejor para un fregadero?
Acero inoxidable
Es el tipo de material de fregadero más económico y popular para las cocinas. Fácil de limpiar, no se oxida. En cuanto al diseño, están lejos de ser la única opción. Los fregaderos de acero inoxidable son redondos, cuadrados, rectangulares, mates o lacados, incluso grabados.
Menos - el producto hace ruidos "metálicos" cuando se colocan los platos en él, o el agua sale del grifo. En los modelos con capa aislante, el ruido se reduce al mínimo. La superficie del acero también deja un residuo blanquecino de gotas de agua secas.
Un imán le ayudará a determinar si el fregadero es realmente de acero inoxidable. Un imán no se adhiere al acero inoxidable. Si lo hace, se trata de un fregadero de acero inoxidable que no se oxida.
Hierro fundido
Son fregaderos de metal esmaltado. Solían ser muy populares, pero desde entonces han disminuido ligeramente, aunque siguen siendo comunes. El hierro fundido es un metal fuerte, el recubrimiento de esmalte también es bastante duradero. Sin embargo, si se golpea la superficie con fuerza (por ejemplo, si se deja caer una sartén en el fregadero), puede agrietarse o astillarse. Sin embargo, este revestimiento sigue siendo más resistente que la cerámica. La desventaja es que el hierro fundido puede oxidarse con el tiempo. Es mejor no limpiar el esmalte con abrasivos, para que no pierda su brillo.
Otros materiales
Los fregaderos de la cocina también están hechos de estos materiales:
- Compuesto - acrílico, corian, silgranite, etc. Se utilizan para hacer fregaderos de diferentes formas y colores. Estos materiales no son tóxicos, soportan altas temperaturas y absorben perfectamente el sonido del agua y el traqueteo de la vajilla. El acrílico no se mancha. La desventaja es que es más caro.
- Piedra artificial. El material está hecho de migas de granito, cuarzo o mármol unidas con resina. La superficie se suele cubrir con un compuesto especial para protegerla de las bacterias y el moho. El material artificial es ecológico y más cálido al tacto que la piedra.
- Cerámica: tiene un aspecto atractivo, la superficie no se raya, soporta altas temperaturas y es fácil de limpiar. El inconveniente es que es pesado y puede agrietarse con el impacto. Si lavas ollas pesadas, existe el riesgo de dañar el fregadero.
- Materiales naturales - madera y piedra impermeables (granito, mármol, ónix, etc.). Los fregaderos de piedra se tallan a partir de una sola pieza de piedra o se unen con losas. Son muy pesados, por lo que deben colocarse sobre una base robusta. Pueden quedar manchas en la piedra. Muy inusual y elegante, pero demasiado caro.
¿Cómo elegir?
El material para elegir un fregadero depende de varios factores:
- Qué tipo de uso se va a hacer. Si tiene que lavar mucha vajilla pesada y de gran tamaño (ollas grandes, sartenes), un fregadero de cerámica no es la opción adecuada. El acero inoxidable o el hierro fundido pueden soportar una paliza.
- Combinación con el diseño. Si tiene una cocina de alta tecnología o de estilo loft, un fregadero de acero o hierro fundido completará el aspecto y combinará bien con otras superficies metálicas. Si tienes una cocina de estilo rústico o vintage, un fregadero de cerámica o acrílico con aspecto de piedra natural o madera es perfecto.
- Práctico. Las manchas son más difíciles de eliminar de la piedra o de la cerámica opaca. Las manchas y las salpicaduras suelen ser visibles en el acero inoxidable. Hay que frotar el metal para eliminarlos.
Sea cual sea el material del fregadero, los productos modernos tienen un aspecto muy atractivo. Puede elegir un modelo clásico u original que combine con el interior de cualquier cocina.